Pueblo de Dios 1 Pedro 2:9-10 De acuerdo con la enseñanza de Pedro en 1 Pedro 2:9-10, el hecho de ser criaturas nuevas en Cristo y parte del pueblo de Dios es un gran privilegio que debería reflejarse en nuestra forma de vida. Pedro describe a los creyentes como "linaje escogido, real sacerdocio, nación santa, pueblo adquirido por Dios" (1 Pedro 2:9). Este pasaje de la Escritura nos muestra que, al igual que Israel en el Antiguo Testamento, los creyentes son llamados a ser un pueblo santo y apartado para Dios. Este llamado conlleva un gran privilegio y responsabilidad. Como miembros del pueblo de Dios, somos llamados a reflejar Su carácter santo y amoroso en todo lo que hacemos. El hecho de ser parte del pueblo de Dios debe motivarnos a vivir de una manera que honre a Dios y refleje Su amor y gracia hacia los demás. Debemos esforzarnos por vivir en obediencia a Su voluntad y a Su Palabra, buscando siempre agradarle en todo lo que hacemos. Además, como miembros del pueb
"Porque ¿qué tiene el hombre de todo su trabajo, y de la fatiga de su corazón, con que se afana debajo del sol?." (Eclesiastes 2:22)