Título: La Autoridad para Edificar Texto Base: 2 Corintios 13:10 "Por esto os escribo estando ausente, para no usar de severidad cuando esté presente, conforme a la autoridad que el Señor me ha dado para edificación, y no para destrucción." Reflexión: El apóstol Pablo, en su epístola a los corintios, revela un aspecto fundamental de su liderazgo. Aunque tenía la autoridad para corregir y reprender, su objetivo principal era la edificación, no la destrucción. Esta perspectiva revela la esencia misma del liderazgo cristiano. Cuando nos encontramos en posiciones de autoridad, ya sea en la iglesia, el trabajo, o la familia, debemos recordar que la autoridad que ejercemos debe ser moldeada por el carácter de Cristo. Pablo, a pesar de su apostolado, mostró humildad al no querer usar severidad innecesaria. Su autoridad estaba arraigada en la responsabilidad de edificar, no destruir. El llamado a la autoridad en la vida cristiana no es un llamado al control tiránico,
"Porque ¿qué tiene el hombre de todo su trabajo, y de la fatiga de su corazón, con que se afana debajo del sol?." (Eclesiastes 2:22)